lunes, 21 de enero de 2008

"La que és"

Mientras empacaba mis cosas para rotar de campamento, otro soldado desempacaba su equipo militar para tomar mi posición.

En un momento dado abrió su laptop y para mi sorpresa su desktop no se adornaba con "un paisaje" o la foto de alguna pomposa modelo: era la foto de una chica que (con la mayor sencillez del mundo) sonreía para la cámara.


-“Quien es esa… tu jeva?”
Pregunté con cierto aire de hombría barata… de esa que con frecuencia se respira en el ejército.

-“Es mi esposa”Ante la respuesta del muchacho (por cuyos razgos faciales representaba tener algunos 20 años) mi sorpresa no se hizo esperar:

-“¿Y porque tu te casaste tan joven brother!?”
Aun no terminaba del todo mi pregunta cuando (con un energético gesto de sus manos) señalo la laptop y respondió:

-“Por que ESA es la que és!”

Jamás olvidaré la seguridad de aquellas palabras. No fue un 'quizá', un ‘creo’ o una posibilidad. Más que un hombre enamorado, su lenguaje corporal irradiaba certeza (...) una certeza plena y segura de aquella mujer en la foto era simple, llana y sencillamente “la que era”.

En mi admiración también experimenté cierta tristeza pues si bien es cierto que he amado (y me he sentido endemoniadamente atraído) nunca he sentido ese urgente deseo de correr a los brazos del matrimonio.
Si bien reconozco que (socialmente hablando) es "lo ideal"... observo la idea del casamiento con cierto grado de recelo.

Miedo al matrimonio

A pesar del trillado cliché de que “los hombres le temen al matrimonio” me atrevo a decir que a lo que realmente le tememos (al menos yo) es al fracaso dentro del mismo. La idea de esa ceremonia donde dos personas prometen amarse y estar juntas “hasta que la muerte los separe” (sellando al final su "pacto" con un beso) es bella, linda, preciosa (es mas, creo que voy a llorar!).

Sin embargo las estadísticas evidencian que en Puerto Rico (en tan solo el año 2004) hubo un total de 15,197 divorcios, lo que (en colaboración con otros datos) significa que 3 de cada 5 parejas que se juraron ‘amor eterno’ terminaron firmando una sentencia divorcio frente a sus respectivos abogados (inserte cara de espanto aquí).

(www.tendenciaspr.com/Poblacion/Tablas_familia/matrimonios_divorcios/Evolucion_divorcios_2004.htm)

Con esto no estoy diciendo que no me voy a casar nunca. De hecho, creo que amar y ser amado es parte integral de nuestra naturaleza:
A diferencia de otras especies que se aparean y JAMAS vuelven a encontrarse, el ser humano es una especie misteriosamente gobernada por la necesidad de no sólo de aparearse sino tambien de compartir sencillas cosas de la vida que (en términos de supervivencia y conservación de la especie) son realmente insignificantes: Compartir un amanecer, una alegría, una caricia o simplemente una puesta de sol en compañía, conductas "absurdas" que aún los grandes avances de ciencia no han sido capaces de explicar...

Muchas cosas pasaron por mi mente pero (entre tanto) no me queda de otra que jugar el "juego de la vida" hasta encontrar la mujer con la que (con la misma seguridad del joven soldado) me inspire un alto, claro y certero "esa es la-que-és" ^_^

3 comentarios:

LaNegra dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
LaNegra dijo...

Alfredo, te felicito y admiro tu manera tan clara y apasionada de escribir lo que sientes. Estoy TAN Y TAN de acuerdo contigo en este tema, que parece que eso lo escribí yo!
Te felicito y te reconozco en seguir esperando a que llegue ese momento en que conozcas "la que es". Me encanta que creas en lo que quieres y seas un ser humano honesto; sobre todo, honesto contigo mismo.

Con esto en mente, dime que opinas de ésta canción: Shakira - The One.

Read the lyrics:
http://www.sing365.com/music/
lyric.nsf/The-One-lyrics-Shakira/
DCCCBF37FDD0294748256AFC002A8CFB

4ever dijo...

Saludos, yo pienso que los mismas estrellas fugases la causamos nosotros los seres humanos. Valoramos las cosas buenas cuando las perdemos. Cuando tenemos a una persona que nos entrega su corazon y en vez de entregarle el mismo afecto le rompemos el corazon. Se juegan con los sentimientos, se llegua a ser infiel ...y porque? Acaso los seres humanos no somos seres inteligentes...lo bueno del ser humano es que aprendemos de los errores. Si realmente somos capaces de aprender de los mismos debemos tener conciencia de que todo el mundo merece ser feliz y amada. Cuando pase una estrella fugaz no admires la rapidez con la que que se mueve si no admirar la verdadera belleza cuando se nos presenta en nuestras vidas.